lunes, 22 de julio de 2024

¿Qué pasó con los KC-2 Turbo Trader brasileños?

KC-2 Marinha do Brasil artist illustration No Barrel Rolls
Ilustración artística del KC-2 Turbo Trader sobrevolando al portaaviones São Paulo.
Fuente: Marinha do Brasil. Retocada digitalmente por No Barrel Rolls.


Con la adquisición en septiembre del 2000 del NAe São Paulo (A12), ex-Foch francés, la Marinha do Brasil (o MB) dio un salto cualitativo en capacidades y doctrina, al reemplazar al anterior NAeL Minas Gerais al mismo tiempo que formaba su primer escuadrón de ala fija gracias a la adquisición de 20 A-4KU y 3 TA-4KU Skyhawks de la Fuerza Aérea de Kuwait.

Sin embargo, un escuadrón de caza no basta para integrar un ala aérea embarcada, quedando pendiente la adquisición de una plataforma que pudiese cubrir roles como ASuW, COD y reabastecimiento en vuelo. Para ello la MB dará inicio al programa de adquisición KC-2 Turbo Trader el cual quedará trunco muy cerca de la entrada en servicio de la primera aeronave.



La historia comienza en 1965, cuando el Presidente brasileño Humberto de Alencar Castelo Branco destrabó una disputa entre la MB y la Força Aérea Brasileira (FAB, Fuerza Aérea Brasileña). Branco permitió a la MB la operación de helicópteros, mientras que la FAB operaría las aeronaves de ala fija.

Como resultado, en la cubierta del NAeL Minas Gerais (A11) coexistirían dos grupos aéreos: el de la Armada operando helicópteros, y el de la FAB equipado con los veteranos Grumman S-2 Tracker. De esta manera, el buque pasó la mayor parte de su carrera en roles antisuperficie (ASuW) y antisubmarinos (ASW).


Douglas AF-1 Skyhawk Marinha do Brasil VF-1
Utilizando el indicativo radial “Falcão” (Halcón en castellano), este AF-1 del VF-1 esta pronto a apontar sobre el São Paulo.
Fuente: 
Marinha do Brasil vía Wikimedia Commons.


Sin embargo a finales de los 80 sus catapultas quedaron fuera de servicio perdiendo la capacidad de operar aviones de ala fija. Esta situación se revertirá a mediados de los 90, cuando se adquiera una de las catapultas del ARA 25 de Mayo dado de baja por la Armada Argentina. 

Las nuevas catapultas no vinieron solas. Junto con este equipo, la MB recupero la capacidad de ala fija orgánica, es decir; podía volver a operar sus propios aviones. Esto dará inicio a un programa de modernización y ampliación de capacidades que derivó en dos hitos principales para la MB. La compra de los cazas A-4 a Kuwait y la adquisición del Foch a Francia, con la posterior baja del Minas Gerais. Denominados AF-1 en la MB, estos aviones conformaron el 1.º Esquadrão de Aviões de Interceptação e Ataque (VF-1), con asiento en São Pedro da Aldeia, Rio de Janeiro.

Para tener un ala embarcada plenamente capaz, los AF-1 no podían operar solos. La MB determinó que los primeros roles que necesitaban cubrirse era el de COD (Carrier Onboard Delivery, es decir el de transporte de carga y personal) y el de reabastecimiento aéreo (REVO); el cual se creía que podía ser cubierto por la misma plataforma. Adicionalmente, se creía que el sistema de armas seleccionado podría ser utilizado también como un medio de alerta aérea temprana (AEW).

Una aeronave COD es un diseño altamente especializado, que a veces puede ser solucionado modificando un diseño existente, pero esto resultaría muy costoso por lo que elegir una aeronave existente simplificaría las cosas. Claro que la lista de aviones COD producidos o en producción en occidente se puede escribir en un billete de tren. Para empeorar las cosas, el São Paulo, por sus características constructivas, limitaba la velocidad y el peso de las aeronaves que podían operar sobre su cubierta. Una dificultad que para la Aéronavale fue un verdadero dolor de cabeza.

Estos factores apuntaban a un solo avión; el Grumman C-1A Trader del cual había gran cantidad de ejemplares disponibles en los EEUU provenientes de los inventarios de la Armada estadounidense que se podían adquirir por medio del programa FMS (Foreign Military Sales). Junto con el Trader, se podían adquirir ejemplares de su pariente, el S-2 Tracker, el cual podía ser utilizado como una plataforma AEW, o bien modificado para COD si no se conseguían ejemplares del C-1A. 


Grumman C-1 Trader in Marsh Aviation
Uno de los C-1 Traders recién salidos del AMARG y listo para comenzar su transición al estándar KC-2 en las instalaciones de Marsh Aviation.
Créditos de la imagen a quien corresponda. 


Sobre el escritorio de la Diretoria de Aeronáutica da Marinha (similar al NAVAIR americano) se apilaban las ofertas, tanto de empresas extranjeras como brasileñas, por el Tracker por considerarlo la opción de menor riesgo. Dichas ofertas, giraban alrededor del "Turbo Tracker" una actualización completa del veterano avión, equipada con motores turbohélice y aviónica moderna.

Finalmente, en 2009, la MB publicó el Plano de Equipamento e Articulação da Marinha do Brasil (PEAMB) en donde establecía su programa de adquisiciones de cara a 2030, la intención de adquirir ocho aeronaves COD/REVO y otras ocho AEW. Un año más tarde, se publicaba en el boletín oficial (DOU) una partida presupuestaria para la compra de ocho C-1A por medio del programa FMS con un valor total de U$S 234,806 (U$S 338,194 actualmente). En el DOU también se aclaraba el establecimiento de otra partida para una “...visita técnica de inspección de células del avión S-2G Tracker en Uruguay”, por el valor de U$S 7,991 (actualmente, U$S 11,509). Por lo que se puede asumir que el Tracker estaba siendo considerado como plataforma AEW embarcada.

El 20 de octubre de 2011 se firmaba el contrato para la adquisición de los ocho C-1A vía FMS los cuales se encontraban almacenados en el AMARG en la base de la USAF en Davis Monthan en las afueras de Tucson, Arizona. Cuatro de las células serían utilizadas como fuentes de repuestos, mientras que las otras cuatro estaban destinadas a volver al servicio operativo.

Especialistas en Turbo Trackers

Marsh Aviation, con sede en Mesa, Arizona fue la seleccionada para recorrer y modernizar los cuatro C-1A al estándar KC-2 Turbo Trader. Si bien el programa había sido desarrollado originalmente para el Tracker, la empresa tenía el conocimiento y experiencia para adaptarlo al Trader. Es más, 22 Turbo Trackers habían sido entregados al California Department of Forestry and Fire Protection (CAL FIRE), junto con 6 para la Armada Argentina.

Con un valor de U$S 167 millones (más de U$S 233 millones actualmente), el contrato incluía el reemplazo de los motores radiales Wright R-1820-8WA originales por turbohélices Honeywell TPE331-14GR equipados con hélices Hartzell HC-135MA-5 de cinco palas. La cabina analógica recibirá una suite de instrumentos digitales, para convertirlo en un "glass cockpit".  Mientras que el sistema de reabastecimiento en vuelo de manguera y embudo sería instalado en el centro del fuselaje.


KC-2 Turbo Trader Cockpit Marinha do Brasil
Representación artística del cockpit del KC-2 Turbo Trader, dominado por los nuevos instrumentos digitales. 
Fuente: Marinha do Brasil.


Adicionalmente, se instalará una APU ESA RE100CS, un equipo de generación de oxigeno a bordo (OBOGS), un sistema de control ambiental (ECS) y comunicaciones digitales encriptadas.

Los primeros dos ejemplares fueron entregados a Marsh en marzo de 2011 y se esperaba que estuviesen listos en los siguientes 18 meses con una fecha estimada de entrega en abril de 2014, los otros dos ejemplares serían entregados en octubre de 2015.

Pero casi inmediatamente, empezaron los problemas. Tras entregar el último ejemplar a CAL FIRE, la línea de montaje de Turbo Tracker fue cerrada, por lo que Marsh tuvo que reactivarla prácticamente desde cero. 

Tras salvar este escollo, y cuando parecía que todo estaba encaminado; la empresa y su presidente, fueron acusados ​​de conspiración para violar el embargo de armas a Venezuela establecido en la Arms Export Control Act (o Ley de Control de Exportaciones de Armas, en castellano) por haber suministrado motores Garrett T-76 reacondicionados a la Fuerza Aérea Venezolana entre 2005 y 2008.

La investigación del gobierno estadounidense paralizó las actividades de Marsh, dejándola al borde de la quiebra, y al programa KC-2 brasileño en el limbo. Situación que preocupaba profundamente a la MB, quién realizó el siguiente comunicado en marzo de 2013: “Esta [investigación] ha causado la pérdida temporal de la capacidad [de Marsh Aviation] para continuar legalmente entregando los servicios contratados”, en el que también decía lo siguiente: “Marsh ha sido declarado inocente por la Departamento de Justicia de Estados Unidos en octubre de 2012”. 

Esta última afirmación era correcta. Floyd Stilwell, se declaró culpable y abonar una multa de U$S 250,000 (alrededor de 342,000 actualmente) para que Marsh Aviation quedase libre de cargo. Asimismo, renunció a su cargo dejando a su hija al frente.

Con los aviones esperando bajo techo, la MB aceptó una propuesta de la propia Marsh Aviation, que ofrecía subcontratar el trabajo con M7 Aerospace, la filial local de Elbit Systems of America. De esta manera, el trabajo en los aviones no se detendría, mientras que Marsh recuperaría algo de su estabilidad financiera al quedar como contratista principal. Junto con este contrato, se firmó otro por compensaciones industriales valorado en U$S 110 millones siendo la principal beneficiaría la empresa AEL Sistemas de Porto Alegre.


KC-2 Turbo Trader in Marsh Aviation
Identificado como "27" esta célula de KC-2 Turbo Trader fue la que alcanzó el grado de avance más completo en las instalaciones de Marsh Aviation. Los motores de 27 fueron encendidos por primera vez el 15 de noviembre de 2018 con la presencia de personal brasileño.
Fuente: Marsh Aviation via Revista Força Aérea.


Ahora si, parecía que el programa KC-2 nuevamente estaba encarrilado aunque con algunas demoradas. Originalmente, se había previsto el primer vuelo del prototipo para noviembre de 2017 y la entrega del primer avión operativo para diciembre de 2018. 

Sin embargo, recién el 15 de noviembre de 2018 se pusieron en marcha por primera vez, los motores de uno de los Trader, por lo que la fecha del primer vuelo se postpuso a septiembre de 2019, con la entrga del primer ejemplar en la segunda mitad de 2012.

Mientras los técnicos trabajaban, las futuras tripulaciones de estos aviones habían completado su entrenamiento básico de vuelo en la Academia de la FAB, para luego obtener su certificación en portaaviones en los EEUU volando los T-45 Gloshawk en la base de Kingsville. 

La futura tripulación de vuelo del KC-2 ya está recibiendo entrenamiento básico de vuelo en la Academia de la Fuerza Aérea Brasileña. Tras cumplir con este paso, se los envió a los EEUU para que realizaran la siguiente etapa, dividida en dos escalones.

El primero fue el curso multimotor MPTS E-2/C-2 en Corpus Christi, Texas, volando el T-44C Pegasus. Para luego continuar con la certificación embarcada con los T-45 en Kingsville, Texas.
Uno de estos alumnos, el Capitão-Tenente (equivalente a un Teniente de Navío de la Armada Argentina) Ricson Raggio Mello; realizó  un apontaje sobre el USS George W. Bush en diciembre de 2017 graduándose como el mejor de su promoción, obteniendo el premio Top Hook.

Paralelamente, se establecía en en São Pedro da Aldeia el 1º Esquadrão de Transporte e Alarme Aéreo Antecipado (VEC-1). El nombre del escuadrón daba una pista de lo atareados que iban a estar los KC-2 en la MB cumpliendo, además de las misiones COD y REVO ya mencionadas; lanzamiento de paracaidistas a altitudes de hasta 25,000 ft (7,620 m), inserción de fuerzas especiales, SAR, MEDEVAC, guerra electrónica y reconocimiento.

Con el tiempo, y la incorporación de los radares Eliradar HEW-784 o Thales Searchwater 2000AEW, se esperaba incluir la alerta aérea temprana a sus misiones. Algunas fuentes aseguran que 8 ejemplares de S-2 Tracker ex-Armada Australiana serían modificados para este cometido, las células habían sido inspeccionadas por Marsh quién había dado el visto bueno, con la integración del radar realizada por Embraer.

Todo parecía venir bien, hasta que la pandemia de COVID-19 se expandió por el globo deteniendo súbitamente todos los trabajos. Para empeorar las cosas, la MB había cambiado de parecer con respecto al São Paulo mientras los aviones estaban siendo modificados.

Muy costoso de reparar

En 2005, la explosión de una tubería de vapor en la sala de maquinas del São Paulo provocó la muerte de un tripulante e hirió a otros 10; por lo que el Almirantazgo decidió someter al buque a un extenso programa de modernizaciones con la intención de dejarlo plenamente operativo para que se uniera a la flota en 2010 prolongando su vida útil.

Las modificaciones fueron completadas en julio de 2010 realizando pruebas de mar al año siguiente; siendo el objetivo que el buque regresara al servicio activo en 2013. Sin embargo, un nuevo incendio ocurrido en la madrugada del 22 de febrero de 2012, hicieron que la MB se preguntase si valía la pena continuar invirtiendo en el buque.


KC-2 Turbo Trader Marinha Brasilera sideview
Perfil a color de como se vería el KC-2 en servicio con el VAC-1. La carga de combustible transportada sería suficiente para extender una hora de vuelo a un AF-1 o media hora para dos.
Fuente: Diretoria de Aeronáutica da Marinha via Defensa Aérea & Naval.


Finalmente en 2017, y tras pasar varios años amarrado; se decidió dar de baja al São Paulo. La Marina brasileña dio prioridad a la financiación de otros programas como el PROSUB (submarino nuclear) y las corbetas clase Tamandaré; tras considerar antieconómico las reparaciones a un buque con más de 37 años de servicio a sus espaldas. 

Sin el portaaviones, el futuro de los escuadrones que iban a conformar su ala embarcada pendía de un hilo. La MB, decidió reducir al VF-1 a su mínima expresión firmando un contrato con Embraer para la modernización de 7 AF-1B monoplazas y 3 AF-1C biplazas, siendo el último ejemplar entregado en 2022. De esta manera, la MB mantendría un núcleo operativo y doctrinario de aeronaves de ala fija embarcadas a la espera de un nuevo portaaviones.

Tras un proceso que resultó controversial, el São Paulo, fue hundido a 350 km de la costa de Brasil en febrero de 2023 encontrando su lugar de reposo final a 5,000 m de profundidad. Al mismo tiempo que el São Paulo se hundía en las profundidades del océano se publicaba la Ordenanza Nº 21/MB/MD en el DOU, del 10 de febrero de 2023, donde se disolvía el Grupo de Inspección y Recepción de Aeronaves C-1A Trader, oficialmente terminando el programa de adquisición.

Seguramente, en este momento querido lector se debe estar haciendo la misma pregunta que da nombre a esta entrada ¿Qué pasó con los KC-2 brasileños? La respuesta es, nadie sabe. Según las fuentes consultadas, no está claro que tan avanzadas estaban las células al momento de la cancelación o cuáles serán las intenciones del estado brasileño. Marsh fue liquidada y su inventario de células y repuestos de Tracker subastado en diciembre de 2022.

Mientras la MB estudia el futuro de su aviación embarcada, la probabilidad de que en la cubierta de un futuro portaaviones veamos a los KC-2 es escasa.

Fuentes:

6 comentarios:

  1. Entiendo que los AEW montarían el radar Erieye como en el E-99. Aunque también he visto renders con un radomo ventral (sin especificar modelo) al estilo del Tracker ASW original

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    1. Estimado,
      Muchas gracias por tu comentario. En las fuentes que consulté no especificaban el Erieye para los Trackers, aunque si los HEW-748 y el Searchwater para el Turbo Trader, así que no sabría decirte con certeza.
      Sin embargo, es cierto que hay una imagen mostrando un Tracker con el radomo retráctil con un radar AEW sin especificar, acreditada a Embraer. Se la pude ver en este link: https://www.naval.com.br/blog/2010/08/12/marinha-adquire-08-aeronaves-c-1a-trader/ Quizás se trate de una propuesta anterior.

      Un saludo y muchas gracias por leer el blog.

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  2. Y la pregunta que me hago como argentino es: no seria una buena idea comprar todo lo que le quede a la Marina de Brasil de estos aparatos y aprovecharlos como fuente de repuestos para nuestros Turbo Tracker? Con la escasa capacidad actual, quizas, se pudiera mantener los aviones en servicio o llevar de nuevo al aire a alguno mas que este fuera de servicio por falta de repuestos. Saludos!

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    1. Hola Cartriel,

      Muchas gracias por tu mensaje. Con respecto a tu pregunta, en mi opinión, la pregunta que debe hacerse sobre los Tracker del COAN es si resultarían la plataforma ASW más adecuada en este momento; siendo aeronaves embarcadas su operación limita mucho su alcance.
      Otra pregunta cae sobre la capacidad de su aviónica para enfrentar una amenaza moderna.

      Pero, es solo mi opinión.

      Un saludo y muchas gracias por tu comentario.

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  3. Estoy totalmente de acuerdo. Pero teniendo una vision pragmatica en donde necesitamos poner en vuelo lo que se pueda para que el COAN no desaparezca, quizas usar las aeronaves brasileñas para mantener en vuelo los Tracker podria servir de Stop/Gap hasta que se pueda disponer de otro aparato para dicha funcion. Lo ideal, en mi opinion, serian mas P3C. Quizas llegar a una docena. En fin, decisiones que terminan siendo mas politicas que de la/s fuerza/s. Saludos, gran blog!

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    1. Muchas gracias por tu comentario CatrielGB. Recuerda que puedes seguir a No Barrel Rolls en Instagram en @nobarrelrolls

      Un saludo

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