De los países de Medio Oriente solo dos tienen, o tuvieron; desarrollos autóctonos de plataformas de alerta aérea temprana (AEW). Uno de ellos fue Israel, el otro fue Irak. A pesar de haber adquirido sistemas de armas modernos tanto de Occidentales, como de la URSS, el gobierno de Saddam Hussein fue incapaz de conseguir medios AEW de estos proveedores.
"When life gives you lemons, make lemonade" dice el dicho, y eso estaban pensando los ingenieros iraquíes cuando decidieron integrar el radar terrestre TRS-2105 con la célula del Il-76M, dando origen a los Baghdad-I y Baghdad-II.